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En las rutas de la República Orienta del Uruguay que limitan con nuestra provincia se señala la cercanía de los establecimientos escolares rurales con carteles que dicen «Días de escuela». La denominación suena más parecido al título de una película que rememora los tiempos pretéritos de estudiantes de sus protagonistas que a la advertencia más llana de «Despacio Escuela» más extendido en estas tierras.
Al perecer, el trato amable que suelen practicar en general los uruguayos también es trasladado a un uso afable del lenguaje en la cartelería.
Dicho sea de paso, valga la siguiente digresión: en el marco del actual debate sobre la fumigación con glifosato en torno a las escuelas entrerrianas este tipo de avisos, además de ser dirigido a los conductores de las carreteras, deberían estar presentes tanto para quienes aplican el veneno como a quienes permiten hacerlo.
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